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Como fotógrafos seleccionamos aquello que nos interesa conservar en el encuadre, descartando todo lo que consideramos superfluo. Y las sombras, sin ser exactamente elementos formales, sino proyecciones y efectos de la luz, en la fotografía cobran un dinamismo e identidad propios, invitan a imaginarlas dotadas de vida.
Una sombra espectacular, amenazadora, casi de película de terror. Aunque vemos que es un molino, también por un momento he pensado en manecillas de un reloj gigante de una torre cercana.
ResponderEliminarQuizás la inclinación la hubiera corregido, ya sabes cómo soy, jeje.
Abrazos.
muy bien vista esa sombra! El blanco y negro le da mucho dramatismo.
ResponderEliminarun abrazo
La verdad es que la fotografía es espectacular y no cuesta ningún trabajo imaginarse a esas sombras en movimiento, girando sobre la pared.
ResponderEliminarUn abrazo,
WOW, this is great, reminds me on old surreal movies and of course film noir! Abrazo J.
ResponderEliminarMe encantan esos juegos de luz. Muchas veces nos encontramos con ellos y no sabemos como "cogerlos", tu has sabido hacerlo maravillosamente bien. El título es genial.
ResponderEliminarUn abrazo
Después de tu propio comentario no hay nada más que decir Ángel. Estoy completamente de acuerdo contigo en todo. Una foto que quisiera tener en la pared de mi casa. Un abrazo
ResponderEliminarUnas sombras engrandecidas por el efecto de la luz.
ResponderEliminarUn abrazo, Ángel.
Qué buenos esos juegos de luz y sombras!!...Ves las aspas del molino y su sombra en la pared nos transmite la sensación de movimiento.
ResponderEliminarMuy bien vista!!
Un abrazo.
El juego dinamico de las sombras y las luces me parece fabuloso. El encuadre da sensación de moviento de las aspas o del propio mecanismo.
ResponderEliminarChapeau por el título.
Un abrazo.
Prefiero el molino rojo, Angel, esa sombras y ese encuadre me genera inquietud, que seguro que era lo que queráis provocar.
ResponderEliminarUn abrazo