Digamos que algunas cosas son en sí mismas. Otras lo son gracias a nuestra mirada, es decir porque los imaginamos. Supongo que la imaginación puede llegar a ser tan poderosa que puede cambiar la percepción de las cosas. Pero corren tiempos acelerados, donde imaginar conlleva un alto precio que la mayoría no está dispuesto a pagar.
Ni los árboles perdidos en medio del bosque escapan a las marcas y señales, aunque sean para señalar caminos y senderos. La foto es magnífica por la luz y las texturas.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo Ángel