Mostrando entradas con la etiqueta Zamora. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Zamora. Mostrar todas las entradas

jueves, 27 de noviembre de 2008

Y dale con las iglesias



Me vais a disculpar, pero el fin de semana pasado estuvimos en Zamora, probando mi flamante D200 (¡qué maravilla de máquina!), y claro, ahora tengo un excedente de fotografías de iglesias que debo dar salida.

La excusa, dependiendo de pareceres diversos, puede ser del todo peregrina. Lo entiendo. Pero el románico y sus iglesias siempre me han atraído poderosamente.

Como tampoco quiero aburrir, os dejo una toma, en este caso nocturna.

Qué fantástica es la fotografía. Te permite capturar la escasa luz nocturna tomando prestado, por unos instantes, ese tiempo privado, su tiempo, que tienen las calles y los edificios de noche, mostrándonos otra realidad, que probablemente durante el día, no percibamos.

Nikon D200. Objetivo 17-50mm f/2.8G. Distancia focal 17mm. Diafragma f/16. Velocidad de obturación 4s. Sensibilidad ISO 100.

martes, 25 de noviembre de 2008

Horario de misa



Puedo definirme como ateo, no beligerante, eso sí. Respetuoso con quién tiene creencias aunque yo no comparta, y siempre que respeten mi postura personal, claro está.

Tras esta aclaración, en este post la protagonista, de nuevo, es una fotografía que tiene que ver con el culto de la religión cristiana. La persona que aparece en la toma está consultando los horarios de misa. El lugar, una iglesia románica de Zamora. De mañana, la intensa luz que baña la entrada a la iglesia, contrasta con la penumbra de su interior. Tal vez, sin querer, refleje en cierto modo, el sentido de la religión, ese contraste de luz y sombra, de objetividad y subjetividad, lo divino y lo humano. O tan sólo el echo de creer o no creer, el acto de fe en sí, una línea muy marcada pero, a la vez, muy frágil.

Nikon D200. Objetivo 17-50mm F/2.8G. Distancia focal 50mm. Diafragma f/6.3. Velocidad de obturación 1/125s. Sensibilidad ISO 100.

lunes, 24 de noviembre de 2008

Los sábados al sol



¿Qué se puede hacer una fría tarde de otoño en Zamora?. Pues evidentemente muchas cosas, como en casi cualquier ciudad, y no quiero entrar en polémicas, que si ciudades grandes, pequeñas, ... Una de esas cosas que se pueden hacer, es aprovechar los rayos de sol del atardecer para charlar tranquilamente mientras nos calentamos la espalda.

Otra de las cosas que se pueden hacer es contemplar la puesta de sol, sin más, y robar una fotografía a un grupo de señoras descuidadas, que conversan plácidamente, mientras que el calor del último sol aún hace la tarde agradable.

Y se me ocurren muchas más cosas, pero prefiero no aburrir ... además, hasta aquí, el post me viene de perlas para subir la fotografía que lo ilustra.

Zamora. Mirador en las murallas sobre el Duero.

Nikon D200. Objetivo 12-24mm f/4G. Distancia focal 16mm. Diafragma f/7.1. Velocidad de obturación 1/250s. Sensibilidad ISO 125.