__
Hay direcciones que son fáciles de seguir, marcas claras que nos indican lo más adecuado y que entra dentro de una concepción racional de lo qué está bien o está mal. No siempre es así porque nada es tan simple, los caminos están llenos de bifurcaciones y alternativas, por eso en ocasiones parece que andemos desorientados, perdidos entre mil voces y otras tantas señales poco precisas, confusas o directamente falsas.