__
Son solo pequeños detalles, como parpadeos de un ojo curioso, de un obturador inquieto, de un instante en el tiempo mientras todo discurre a mi alrededor. Mis sentidos se funden con la cámara como si no existiera nada más. Es como una forma sencilla e intuitiva de meditar, sin otra necesidad que unas zapatillas cómodas y ganas de caminar. Observar la vida, ese otro deporte sin medallas ni perdedores, que solo consume algo de tiempo, sin más exigencias, sin límites, sin edad.
Todo un gran momento. Eso tuyo es disfrutar sin prisas.
ResponderEliminarCuando estás ahí, observando la vida, no importa el tiempo... lo de las zapatillas cómodas te lo compro... ;-)
ResponderEliminarDos personajes, cada uno a lo suyo, sin interferir el uno con el otro.
Aferradetes, Ángel.