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Hay lugares que invitan a ser fotografiados sin más, no requieren preparación, ni complejos medios en largas sesiones. Son lugares por los que paso y algo se “remueve dentro” de mi con la suficiente fuerza como para invitar a la fotografía, ese acto del subconsciente que de alguna manera se manifiesta con la intención de que nos conozcamos nosotros mismos un poco más.
La naturaleza se hace cargo de ella.
ResponderEliminarExcelente B/N.
Aferradetes, Luis.
Lo puede todo, un abrazo
Eliminar¡Perdón! quería decir Ángel. 🤦♀️
ResponderEliminar;-)
EliminarDa miedo penetrar en el interior, ya no tiene techo, pero hay peligro de que se derrumbe.
ResponderEliminarFelia fin de semana.
Ya lo creo, un abrazo
EliminarNo tengo palabras Ángel para dejar un comentario. En todo caso, se me ocurre decir que esta foto me ha dejado impresionado, porque como a tí, me ha revuelto algo dentro.
ResponderEliminarSe que estos lugares te enganchan Luis. Un abrazo
EliminarLa belleza de la decadéncia extrema. Excelente imagen!
ResponderEliminarUn fuerte abrazo Ángel
Un abrazo Josep
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