En alguna ocasión he comentado que esta bitácora funciona como un foto-diario, un espacio donde escribo con la fotografía añadiendo aquello que me interesa o me llama la atención. Hace algunos días leía a Laura Sam que sobre el fracaso y el éxito en esta sociedad que vivimos afirma:
“Cuando empecé a leer poesía leía sobre todo a poetas malditos; suicidas, alcohólicos o tuberculosos, enfermos mentales, gente realmente desequilibrada que de alguna manera sólo podía existir en aquellas palabras. Pero lo más parecido a ser maldito hoy en día es tener ansiedad porque no sabes muy bien quién eres ni qué haces aquí; porque es prácticamente seguro que jamás podrás tener una casa propia; porque ni siquiera tienes dinero para ir a terapia, pero probablemente sí para pedirte una pizza por Glovo, una pizza que te comerás viendo una peli en Prime y claro, eso no es lo que esperabas de la vida”.
Me hace pensar sobre lo que yo personalmente esperaba de la vida, ¿albergaba demasiadas expectativas?.
Bueno el tiempo pasa ineludiblemente y algunas de esas expectativas no se han cumplido pero, aun queda mucho tiempo para replanteárselas o incluso pensar en otras de las que entonces no teníamos idea. El tema da para una charla con unos cafetitos de por medio. Abrazo
ResponderEliminarYa lo creo Luis, he estado fuera unos días, pero en cuanto me organice te doy un toque! :-)
EliminarDe joven, se tiene la cabeza llena de sueños y si pones empeño algunos de ellos se cumplen, mientras otros estás aún por cumplir.
ResponderEliminarUn abrazo
Es la vida, un abrazo
EliminarCuando eres joven, todas las expectativas delante de ti. Al ir cumpliendo años van disminuyendo, cuando la realidad es más dura de lo que pensabas y vas pensando en otras mucho más concretas, quizás más asequibles...
ResponderEliminarBuena nocturna en movimiento.
Aferradetes, Ángel.
Gracias, me alegra que te guste. Un abrazo
EliminarLas expectativas se cumplen o no. Creo que lo importante es el camino. El camino que recorremos es lo que nos hace vivir, no las expectativas cumplidas. Somos estelas en el camino, como en la foto.
ResponderEliminarEs una buena lectura de la foto y de la vida... al final el camino es lo que cuenta y sie3mpre dejamos una estela de luz el el trayecto... (poetas que somos ;-)
EliminarEs posible que las espectativas siempre sean mas altas, pero es mejor no procuparse demasiado i Carpe Diem!
ResponderEliminarUn fuerte abrazo Ángel
Vivir el momento, sí señor. Abrazo
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