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Prisas, ajetreo, carreras, … devenir del día a día en la ciudad. Momentos parecidos que se suceden, pero nunca iguales. Siempre personales, con historias propias, sonidos diferenciales que quedan en el recuerdo (¿para siempre?), con la fotografía.
Buen juego de contraluces y lineas inclinadas
ResponderEliminarGracias José, de vez en cuando me gusta alterar la estructura.
EliminarY cada segundo de nuestras vidas es distinto y efímero, al instante ya es pasado.
ResponderEliminarExcelente fotografía.
Un abrazo.
Bien dicho Isabel. Un abrazo
EliminarBonita foto, me recuerda mucho a los hombres grises de Momo.
ResponderEliminarBesines utópicos, Irma.-
Un beso Irma! :-)
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