El mundo parece estar en venta y últimamente no levantamos cabeza, vamos de susto en susto. Prefiero no detenerme en las grandes disfunciones que nos rodean, mirar para otro lado e ignorar el presente es imposible incluso temerario, claro. Pero de vez en cuando es necesario despejar las ideas, airearlas para ventilar los pensamientos y permitir así el fluir de energías positivas. En venta también encontramos todo tipo de cosas en rastros y mercadillos, esos lugares tan placenteros de recorrer sin prisas ni ideas concretas, tan solo dejarse llevar por la curiosidad de la mirada.
Aunque no se vea el precio, deduzco que son artículos bastante rebajados. Es una buena tentación, para la mujer, que pase por allí.
ResponderEliminarCaminar pausadamente, sin agobios, porque en cualquier esquina puede surgir esa historia que ha captado nuestra retina y queremos traernos en nuestra cámara, como esta foto tan curiosa y simpática. ¡Bravo! ¡Me encanta! Buen miércoles, Ángel :)
ResponderEliminarCurioso el cartel, más que lo que se vende.
ResponderEliminarCada día es más necesario encontrar esos momentos para airearse, aunque desconectar nos resulte casi imposible.
Aferradetes, Ángel.
Todo y todos parece que estemos en venta. No tengo claro que consigan la compra total.
ResponderEliminarMuy buena imagen de calle!
Un abrazo Ángel
Parece que hoy por hoy todo, absolutamente todo anda en venta. Incluso aquello que resulta intangible e invisible.
ResponderEliminar