Hoy día las cámaras digitales, compactas, automáticas, móviles, etc… hacen prácticamente todo y exigen al usuario muy pocos conocimientos sobre fotografía. Los resultados están ahí, los recibimos a diario en forma de inputs desde cualquier red social. Todo se mezcla y las imágenes se multiplican porque pocas personas conocen o valoran el sentido de la fotografía. Vivimos una sociedad visual cuya forma de comunicación básica ha pasado de la palabra escrita a la imagen, sin embargo me da la impresión que poco importa la ortografía y la gramática visual. Igual ya no entiendo nada y ando descolgado de un mundo que gira a velocidad supersónica. Quizás por eso hay días que solo me apetece el juego. Montar una lente de plástico en la cámara y buscar un motivo que permita la diversión. Y entonces dejo de dar tantas vueltas a las cosas y salgo solo a pasar un buen día fotografiando.
A mi ese juego me parece que es una cuestión de salud mental, de pura y dura calidad de vida Ángel. La fotografía ha llegado a un punto en el que se sobrevalora de tal manera que a veces pienso que con ella está pasando como con el lenguaje oral, que a fuerza de olvidarnos del significado de las palabras y simplemente querer apropiarnos de ellas para un uso personal, están perdiendo su autentico valor.
ResponderEliminarPor eso creo que de vez en cuando es bueno refrescar el uso de la fotografía y simplemente salir a jugar con uno mismo, salir a reírse de uno mismo y de sus conocimientos de las reglas y todo eso. Abrazo
Hoy por hoy es lo que busco, un poco de paz y de salud mental Luis. Un abrazo
EliminarHay muchas imágenes y muy pocos imaginarios. La fotografía, como cualquier lenguaje, se aprende poco a poco. Ahora, todo va demasiado rápido y todo es instantáneo porque todo se queda en nada con demasiada rapidez...
ResponderEliminarAsí es, un dolor. Un abrazo!
EliminarQuizás esos pasos agigantados se nos hacen difíciles de digerir para los que hemos vivido otra época, tanto si lo miramos desde un punto estético como desde un punto correcto. Sucede con todo y eso, a veces, me genera miedo.
ResponderEliminarSólo nos quedan esos momentos en que "dejamos de pensar" y salimos a divertirnos un rato.
Aferradetes.
De eso se trata, como dice Luis, salud mental. Un abrazo
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