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Sombras que deambulan entre reflejos y estancias, sensibles a cualquier variación de la luz, tensionadas buscando el rincón preciso donde perderse en la oscuridad. Como si fuesen conscientes, acaso con vida propia se mueven al compás de cada destello, de cada sujeto, del paso de las horas. ¿Qué seríamos los fotógrafos sin ellas?, seguramente nada pues las debemos todo.
¡Cuántas cosas hay que ver esta foto! Me encanta. Y me sumo a tu oda a las sombras en fotografía
ResponderEliminarQuien me lo iba a decir ;-) ... abrazo colega
EliminarSombras que asoman ante el fotógrafo para recordarle que todo es ese TODO que a veces nos negamos a aceptar. No sabríamos nada de ellas sin esas luces que a veces se nos asoman a los ojos y nos permiten ver esa realidad personal, particular de la que nos asombramos y a la que nos sentimos empujados a retratar. Abrazo
ResponderEliminar"Todo es Todo", así es Luis, la fotografías es un cúmulo de luz y composición, y la disfrutamos valorando cada matiz. Un abrazo
EliminarLuces, sombras... que bien que has sabido encuadrar, aprovechar el espacio y controlar las luces!
ResponderEliminarUn fuerte abrazo Ángel
La luz hizo casi todo. Un abrazo Josep
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