Una explosión de color provocada por la imaginación de un artista plasmada en el muro de cualquier ciudad, y funciona con un enorme poder de liberación, algo así como un “chute” de oxígeno en medio de una durísima ascensión a un “ochomil”, el alivio incluso cuando la tormenta se aprecia demasiado cercana a nosotros.
Su grandes coloridos, hace un gran contraste con la oscuridad del cielo.
ResponderEliminarUn abrazo
Me alegra que te guste. Un abrazo
EliminarY con ese maravilloso cielo, la explosión de color se acentua!
ResponderEliminarUn fuerte abrazo Ángel
Fue una suerte de día, la luz lo es todo. Un abrazo
EliminarMe gusta la variedad de colores, aunque debo decir que no tanto las letras, que en mi caso no son nada liberadoras, al contrario, me ponen más nerviosa.
ResponderEliminarEsas nubes estaban a punto de hacer de las suyas.
Aferradetes, Ángel.
Quizás también el artista busque esa reacción por parte de quien observa el mural. Un abrazo
EliminarUna excelente obra callejera que parece querer detener a esa tormenta que aparece amenazante.
ResponderEliminarMe alegra que te guste Luis
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